Compilación
por P. Modesto Lule Zavala msp
El
porno estimula en un plazo muy corto la segregación de dopamina. Cada vez hay
más pruebas científicas que sostienen esta idea. La escritora Naomi Wolf dice: “Hace
seis años, escribí un ensayo titulado El mito del porno, en el que señalaba que
los terapeutas y consejeros sexuales estaban comenzando a asociar el incremento
del consumo de pornografía en los hombres jóvenes con un aumento de casos de
impotencia y eyaculación precoz en ese mismo grupo de edad. Se trataba de
jóvenes saludables sin patologías físicas ni psicológicas que pudieran
justificar una disfunción sexual.