La identidad del coro parroquial

LA RADIOGRAFÍA DEL CORO PARROQUIAL.

 parte 1 de 3:


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El audio de los 3 temas aquí:
http://padremolleto.blogspot.mx/2012/01/podcast-los-cantos-en-la-misa-pte1-de-3.html

Compilación Por P. Modesto Lule msp

padremodestomsp@gmail.com

Presentación.

Como sacerdote muchas he visto fallas en la participación de los coros en las celebraciones eucarísticas. Por eso ahora quiero compartir con todos aquellos que forman parte de un coro, o tienen intención de formar un coro, algunas directrices que nos ayuden a todos a tener una mejor participación en la santa Misa. Que sea un festín para todos, tanto para los que presidimos como para los que van cada domingo a llenar su alma de Dios. Quiero con todo esto aclarar que lo que voy a mencionar el día de hoy, no es un reclamo ni mucho menos un juicio para quienes pueden estar equivocados en estos aspectos, mi intención es la de ayudarnos mutuamente. No se sientan ofendidos ni lastimados, por lo que podamos decir.

La música y el canto en misa.

La música y el canto son esenciales en toda fiesta humana, y también en nuestras celebraciones litúrgicas. La música en la misa no es un mero adorno, “para que la celebración salga bonita”, como lo pueden pensar algunos. Los cantos en misa son oración hecha música, son palabra cantada. “Cantar es orar dos veces”, decía san Agustín. Por lo mismo es sumamente importante que en cada misa exista un coro, un grupo de personas que dirijan los cantos propios para la celebración. Pero, aquí viene el famoso pero que le vamos a poner a algunos grupos que con muy buena intención se lanzan a cantar en una misa ignorando ciertos elementos esenciales. Hoy en este episodio vamos a dar a conocer 4 puntos importantísimos que todo integrante de coro parroquial debe saber.

1er punto. LA EVANGELIZACIÓN.

Para que el canto y la música tengan en la celebración de la comunidad el lugar que les corresponde, es necesaria una buena preparación litúrgica y musical de quienes componen el “coro”. No solamente del coordinador, sino de todo el grupo. Muchos llegan a pensar que eso de la formación litúrgica y musical sólo corresponde al coordinador. Esta idea hace que los coros se desintegren muy pronto ya que al no tener una formación, litúrgica, musical y lo principal de evangelización vean el participar del coro como un mero grupo social donde no existe ningún compromiso y al mismo tiempo nunca se le llega a amar. Ooops creo que esto más que explicación ya sonó como a regaño, pero no lo tomen así, estoy poniendo las cartas sobre la mesa para que todo sea más claro. Espero que sigan leyendo, porque voy con más cosas que pueden sonar a regaño pero son verdad.

Estar evangelizados, digo esta palabra porque en ella misma se engloba todo, es decir la preparación litúrgica y al mismo tiempo el conocimiento de la doctrina católica. Miren, cuando los del coro no están evangelizados, puede proponer cantos que no son católicos o no son los más indicados para el momento que se está celebrando. Un ejemplo clásico lo miré hace un tiempo en una iglesia, resulta que en la hora de la comunión al coro se le ocurrió cantar al Espíritu Santo, y vaya que el coro sabía cantar muy bien pero ese momento no era el indicado. Estamos recibiendo a Jesús, un momento para intimidar con él, platicar y para los que no pueden comulgar, pues hacer su comunión espiritual en un momento de silencio o llevados por el canto reflexivo. Pero este coro me pone un canto todo movido y la gente se pone de píe aplaudiendo, moviéndose de un lado para otro y al vernos hasta a mí me dieron ganas, pero estaba dando el cuerpo de Cristo. El otro asunto es cuando el coro no está bien evangelizado al no conocer las partes de la liturgia de la misa puede entonar cantos que son tal vez bonitos pero que no corresponden a la liturgia, o en casos peores, no son católicos. En la mayoría de los casos son protestantes, aunque les voy a decir aquí en secreto que en un momento me toco escuchar una canción secular de bonita letra, pero nada que ver con Dios. Y con lo que respecta a la música protestante, no me voy a detener en este episodio a hablar de ella. Creo que en otro momento lo vamos a hacer para aclarar ciertos puntos en los que no nos ponemos de acuerdo con muchos cantantes católicos que interpretan su música. De forma concreta les digo que algunos de los cantos protestantes son muy bellos, son espirituales, son realmente exquisitos musicalmente si ustedes lo quieren ver así, pero no me van a negar que contienen otra visión espiritual diferente a la de los católicos. La de ellos es una doctrina muy distante de la católica, yo diría abismal. Nosotros creemos en la Virgen, en los Sacramentos, la visión de Dios en ciertos puntos también diferente, nosotros creemos que lo podemos ver y llevarlo a cada uno cuando comulgamos en su cuerpo y su sangre, ellos no lo ven así. Los cantos protestantes que luego interpretan algunos coros donde hablan del Pan que da vida, no es la misma visión que tenemos los católicos, para ellos no se da Cristo en la Eucaristía, en el Pan Consagrado, ellos le hablan a un Dios que aún no está con ellos porque tendrán que esperar hasta la muerte para verlo, para sentirlo, y nosotros no tenemos que esperar a eso. Por eso hace falta tener un poco de reflexión al respecto para ver las diferencias abismales de lo que son los cantos católicos y los cantos protestantes. Urge, urge, urge una buena evangelización en los coros parroquiales.

2do punto. EL CORO SERVIDOR

Que el coro siempre sea un servidor de la asamblea, no un coro “espectáculo”. Y lo voy a decir con todas las palabras que esto implica. El coro espectáculo que solamente se reúne los domingos para cantar como solistas. Convengo que los coros deban actualizarse, pero lo hacen muchas veces sin tomar en cuenta a los fieles que nos acompañan. Cada domingo interpretan cantos donde las únicas voces que se escuchan son las de los solistas del coro, a veces ni si quiera el coro completo. Tal vez muy bellos los cantos, pero el hecho de que sean nuevos para la gente se les hace imposible seguirlos. Los cantos deben ser conocidos por los fieles. Recuerden que una de las tareas de todo coro es enseñar cantos y ensayarlos con la asamblea. El coro debe servir no presumir. Debe dirigir, no “lucir”.

3er punto. LA IMPROVISACIÓN

La improvisación, lamentablemente es muy común en muchas comunidades, por lo mismo empobrece nuestra posibilidad de alabar al Señor. Llegar tarde, no ensayar, no prepararse musicalmente y vocalmente hace que la participación sea pobre y con menos fervor. Desde el que canta, que no tiene don para cantar y quiere quedarse sólo con un micrófono hasta el que toca guitarra y no aprende bien son a veces los culpables que una misa no tenga buen sabor. Y no es por criticar a nadie, pero hay que ser sinceros y hay que reconocer que Dios concede a unos el don de cantar y a otros el de tocar guitarra y en otros casos las dos cosas juntas. No hay que encapricharse a querer cantar por el hecho de saber tocar guitarra o en ocasiones nada más saber rascarle. Convengo que en la liturgia de la iglesia hay momentos de penitencia, pero son períodos cortos, no todo el año litúrgico. Muchas veces más que devoción los que cantan inspirar otra cosa menos devoción. El coro debe prepararse en este aspecto musical y reconocer quien tiene un don y quien otro. Si a ti te toca ser sólo atril, no te preocupes, Dios te ha dado ese don y ese es totalmente tuyo. Por otro lado invitar a los que participan a ser disciplinados y ensayar por lo menos una vez a la semana. La improvisación acaba con el ambiente y se distrae a la asamblea.

4to punto. TOMAR EL CORO COMO GRUPO SOCIAL

El coro, más que dedicarse a acompañar en la asamblea con el canto debe dedicarse a dar testimonio con sus acciones. El mismo grupo puede servir de gran polín para que más jóvenes se acerquen a la Iglesia, pero a su vez no debe de existir una conciencia adormecida con el mero hecho de participar. El miembro del coro puede llegar a pensar que Dios le debe dar gracias por cantar en la misa y que no tiene ningún compromiso con él de hacer algo más. Recuerden que muchas personas ponen en ustedes sus miradas y observan todos sus comportamientos. Lo ejemplar será siempre que todo el grupo tenga la intención de trasmitir un mensaje de fe por medio del canto pero sobre todo por el testimonio. La forma de hablar, de pensar y de vestirse tiene que proyectar ese amor a Jesucristo. De igual manera debe de existir la intención de participar en la comunión en la misa. Puede resultar cuestionante mirar a un grupo de parroquia que participa en la misa como coro pero que a su vez no comulga. Y peor aún si al terminar la misa se les escucha decir palabras altisonantes y en doble sentido. ¿Y qué decir de los que sólo van por ver a la novia y después de la misa hacen profesión explicita de su amor como si fueran matrimonio? El anuncio de la Buena Nueva necesariamente debe ir acompañada de testimonio, sino, resulta una farsa. Para predicar pues el mensaje de Cristo, hay que vivir ese mensaje.

Realmente hay que poner atención para que este punto sea tomado en cuenta y los coordinadores de coros atiendan a la brevedad esos pequeños errores que se dan y proyectar hacia una evangelización eficaz a todos los que participan. No quiero que se piense que estoy generalizando, no son todos, pero lamentablemente se da y hay que corregirlo.

(Estos comentarios continuaran)

Hasta la próxima.

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